
Aprovechando mi sorpresa Charly me dijo sin demasiadas vueltas "Tengo hambre loco." Lo mire con cara de "invitate una pizza" estaba arruinado y faltaban varios siglos para fin de mes. Charly levanto con delicadeza su dedo mayor en su puño cerrado y entendí porque él siempre iba a ser un rockstar y yo un simple asalariado. Paso a mi lado como si no existiera y entró en la cocina. Abrió la heladera que, a esta altura del mes, era como el polo norte. Sacó unos tomates. Sin dirigirme la mirada dijo "En una gira con Sui, Nito y yo vivimos a tomates casi un mes..."
Continuara...
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